La Educación Emocional: de la teoría a la práctica

 

Uno de los objetivos principales de esta revista, que inicia su vida productiva con estas páginas, es contribuir a fundamentar la práctica de la educación emocional desde la investigación científica.

Lo anterior requiere de la implicación y la colaboración de distintos actores, desde sus propios contextos, tales como: docentes, investigadores y estudiantes de posgrado que indaguen sobre la forma y la medida en la que las instancias educativas, formales y no formales, consideran dentro de sus procesos y currículos formativos las competencias emocionales, y cómo se lleva a la práctica el desarrollo de estas competencias. Se necesitan también investigaciones que, desde el ámbito de la educación, el desarrollo humano, la psicología y las áreas afines analicen cómo la formación de las competencias emocionales, o socioemocionales, contribuye al desarrollo de la inteligencia emocional, del bienestar integral, y a la creación de ambientes de aprendizaje y convivencia pacíficos, incluyentes y respetuosos, desde una mirada sociológica, psicológica y pedagógica, socioculturalmente plural y desde el rigor y la objetividad que pueden proporcionar las metodologías investigativas de las ciencias sociales, las ciencias del comportamiento y aquellas que estudian los procesos psicobiológicos y psicosociales. Del mismo modo, se requieren investigaciones aplicadas a la práctica educativa para comprender el impacto y la eficacia que pueden tener ciertos diseños de intervención en educación emocional, así como herramientas educativas específicas en el desarrollo de estas competencias.

Con esta primera carta editorial queremos invitar a todas las personas interesadas en aportar mayor claridad sobre los procesos psicoeducativos y socioculturales asociados al desarrollo de las competencias socioemocionales y del bienestar, a enviar sus contribuciones para abonar a la construcción de una educación emocional mejor fundamentada desde la investigación científica. Extendemos esta invitación, también, a las personas que desde su práctica educativa generan procesos de reflexión a partir de su actividad docente y sobre su contexto didáctico. Sus diversas aportaciones permitirán avanzar hacia la mejora de los procesos de desarrollo humano y de construcción de bienestar individual y colectivo.

La Red Internacional de Educación Emocional y Bienestar (RIEEB) y la Universidad Iberoamericana Ciudad de México se proponen servir de vínculo entre los profesionales de la educación emocional y los investigadores y académicos que analizan los fundamentos, la práctica y los efectos de esta educación, sus dimensiones y competencias asociadas.

Esperamos y deseamos que las páginas de esta revista revelen investigaciones que aporten cimientos, objetividad y pluralidad a la práctica de la educación emocional, que permitan convencer a la comunidad educativa, a las organizaciones, a los diseñadores de política y a la sociedad en general acerca del valor y la importancia de educar sobre y desde las competencias emocionales.

 

 

Dr. Rafael Bisquerra Alzina

Presidente de la Red Internacional de Educación Emocional y Bienestar

 

Dra. Cimenna Chao Rebolledo

Directora de la Revista Internacional de Educación Emocional y Bienestar