Resumen
Basados en más de 30 años de experiencia en programas de transferencia internacional en prosocialidad aplicada del grupo LIPA (Laboratorio de Investigación Prosocial Aplicada), se presenta el vínculo teórico y aplicativo entre educación emocional y los comportamientos prosociales con una revisión teórica que explica y justifica la relación bidireccional existente entre ambos. No existe bienestar emocional sin un contexto prosocial de desarrollo. Y no es posible la optimización prosocial de un contexto sin inteligencia emocional. La prosocialidad se puede considerar un puente de unión entre la educación en valores y la educación emocional.
El artículo presenta una propuesta de intervención para optimizar prosocialmente emociones como el enfado y la ira, la preocupación, la ansiedad y el estrés, la culpa, la envidia, el pesimismo y estados de ánimo positivos, la empatía y la compasión. Se presentan algunos programas aplicativos de educación prosocial facilitando los enlaces para acceder al material de manera gratuita y se plantean nuevas perspectivas para el futuro, como son los kernels prosociales basados en la evidencia. El artículo plantea la necesidad de favorecer el diseño de políticas educativas que integren educación emocional con prosocialidad como un constructo único para alcanzar una educación emocional orientada y finalizada hacia el bienestar y la salud mental de la persona, así como a la mejoría de la convivencia social.

Esta obra está bajo una licencia internacional Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0.
Derechos de autor 2021 Universidad Iberoamericana